• Salmo 129:3

    Los aradores araron sobre mis espaldas; hicieron largos sus surcos.

  • Salmo 129:4

    Pero el SEÑOR es justo; cortó las cuerdas de los impíos”.

  • Salmo 129:5

    Sean avergonzados y vueltos atrás todos los que aborrecen a Sion.

  • Salmo 129:6

    Sean como la hierba sobre los techos, que se seca antes que crezca.

  • Salmo 129:7

    De ella no llena su mano el segador, ni su regazo el que hace gavillas.

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