• Salmo 30:1

    Cántico para la dedicación del templo. Salmo de David. Te glorificaré, oh SEÑOR, porque me has levantado y no has dejado que mis enemigos se alegren de mí.

  • Salmo 30:2

    Oh SEÑOR, Dios mío, a ti clamé y me sanaste.

  • Salmo 30:3

    Oh SEÑOR, tú has hecho subir mi alma del Seol; desde la fosa me has vuelto a la vida.

Continúa después de la publicidad