• Salmo 34:1

    Salmo de David, cuando cambió su conducta ante Abimelec, y este lo echó, y él se fue. [2]Bendeciré al SEÑOR en todo tiempo; su alabanza estará siempre en mi boca.

  • Salmo 34:2

    En el SEÑOR se gloriará mi alma; lo oirán los mansos y se alegrarán.

  • Salmo 34:3

    Engrandezcan al SEÑOR conmigo; ensalcemos juntos su nombre.

  • Salmo 34:4

    Yo busqué al SEÑOR, y él me oyó y de todos mis temores me libró.

Continúa después de la publicidad