• Salmo 39:7

    Ahora, oh Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti.

  • Salmo 39:8

    Líbrame de todas mis rebeliones; no me pongas por burla del insensato.

  • Salmo 39:9

    Enmudecí; no abrí mi boca porque tú eres quien lo hizo.

Continúa después de la publicidad