• Salmo 43:1

    Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa. Líbrame de una nación impía, del hombre de engaño e iniquidad.

  • Salmo 43:2

    Siendo tú el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado? ¿Por qué he de andar enlutado por la opresión del enemigo?

Continúa después de la publicidad