- 
                
                
Oración de David. Inclina, oh SEÑOR, tu oído y escúchame porque soy pobre y necesitado.
             
                    - 
                
                
Guarda mi alma porque soy piadoso; salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía.
             
                    - 
                
                
Ten misericordia de mí, oh SEÑOR, porque a ti clamo todo el día.
             
                    - 
                
                
Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, levanto mi alma
             
                    - 
                
                
porque tú, oh Señor, eres bueno y perdonador, grande en misericordia para con los que te invocan.
             
            
    
    
    
            Continúa después de la publicidad