Y dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su especie, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así.

Produzca la tierra seres vivientes según su especie. En el sexto día se hizo un mayor avance mediante la creación de animales terrestres, todas las diversas especies que, según el estilo hebreo, están comprendidas en tres clases: a saber, ganado, la clase herbívora capaz de trabajo o domesticación; lo que se arrastra, las serpientes y diferentes géneros de reptiles, y mamíferos menores; las bestias de la tierra y las bestias salvajes.

Todos ellos son terrígenos, surgidos de la tierra; ellos pasan sus vidas sobre su superficie, y se mantienen gracias a sus productos. No se da información sobre el modo en que el Creador los creó; y aunque la frase "dar a luz" ahora se aplica para describir la forma ordinaria en que, de acuerdo con las leyes naturales de la producción animal, las diversas órdenes de criaturas han entrado en el mundo desde entonces, no debe considerarse como una indicación del modo particular en que se formaron los primeros animales.

La criatura viviente. El singular se usa colectivamente, para abarcar todo el orden, y el pasaje puede traducirse apropiadamente, 'Produzca la tierra todas las criaturas vivientes según su especie'.

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