Jueces 5:1

Entonces cantaron Débora y Barac hijo de Abinoam en aquel día, diciendo:

Entonces cantaron Débora y Barac... en aquel día. No se dice nada respecto a la autoría de esta noble oda triunfal; pero la crítica moderna ha establecido, mediante una cadena de fuertes pruebas circunstanciales, que es sin duda una efusión de la mente patriótica y piadosa de la propia Débora. La frescura de los sentimientos que impregnan toda la composición, el fuerte odio que se manifiesta hacia el enemigo, como el de alguien que se duele de sus insultos y su opresión, los detalles que se dan con respecto a la severidad y el alcance de sus exacciones tiránicas, los nombres y el número de las tribus confederadas que obedecieron a la llamada de guerra de Barac, el ascenso de las huestes cananeas, su derrota y su desastrosa huida, la descripción de las diferentes situaciones de Jael y de la madre de Sísara, indican el intenso interés y el conocimiento preciso de un contemporáneo.

Además, la selección de los temas que forman la carga de la canción, la escasa mención de la contienda, que contrasta con el manifiesto deleite mostrado en la descripción de la derrota del enemigo, los elogios prodigados a Jael y su hazaña, con el cuadro gráfico de las emociones rápidamente cambiantes de la madre de Sísara, constituyen una prueba inequívoca de que la autora de este hermoso poema fue una mujer, que parece, por el uso de la primera persona ( Jueces 5:7 ), haber sido la profetisa, la esposa de Lapidot.

Cuánto arte puede poseer un cántico de los primeros tiempos antes de David en medio de su sencillez lo demuestra este noble cántico de victoria, que une un diseño realmente grandioso con una ejecución regularmente hermosa, y es un modelo de un canto genuino de victoria de casi ocho siglos antes de Píndaro (Ewald). El modo en que se cantó probablemente fue el que adoptaron las mujeres hebreas al celebrar liberaciones públicas ( Éxodo 15:20 ; 1 Samuel 18:6 ), Débora, como líder, pronunciando las melodías, con el eco de un coro de cantantes femeninas, en presencia de Barac y sus tropas victoriosas a su regreso de la persecución triunfante.