Todos los días del afligido son malos, pero el de corazón alegre tiene un banquete continuo.

Todos los días del afligido son malos. De aquellos cuya aflicción les hace perder un "corazón" esperanzador, como exige la cláusula opuesta.

Pero el que tiene un corazón alegre (tiene) una fiesta continua, literalmente, una 'fiesta de bodas continua', o 'una fiesta de convivencia, donde se sirve bebida', y que de principio a fin es todo disfrute. El gozo y el contentamiento interior disipan las penas exteriores, la pobreza, etc...

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad