El que ama la pureza de corazón, por la gracia de sus labios el rey será su amigo.

El que ama la pureza de corazón (por) la gracia de sus labios (o como margen, y que tiene gracia en sus labios; o, cuyos labios son gracia; es decir, lleno de gracia, el rey (será) su amigo. La pureza de corazón, libre de la extraña mezcla de hipocresía y egoísmo, es el único fundamento sólido para la gracia en los labios.

DeDieu toma la segunda cláusula como parte del predicado, 'Quien ama la pureza de corazón, sus labios son amables, y el rey será su amigo'. "El rey", es decir, el que es rey según el verdadero ideal de la realeza, especialmente el Rey de reyes. La Vulgata apoya la versión en inglés.

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