Estos también son proverbios de Salomón, que copiaron los hombres de Ezequías, rey de Judá.

Proverbios 25:1) . Aquí comienza la tercera parte de todo el libro: una selección de los 3.000 proverbios que habló Salomón, copiado casi 300 años después por "los hombres de Ezequías" (quizás Isaías y Miqueas, Sebna y Joa, 2 Rey. 28:18). El hecho de que la Palabra de Dios saliera de su oscuridad fue un acompañamiento apropiado de la reforma que emprendió ese buen rey ( cf. 2 Crónicas 29:1 y 2 Crónicas 30), como en el efectuado por Josías posteriormente.

Las citas frecuentes de esta parte en el Nuevo Testamento marcan su canonicidad (cf. Proverbios 25:5 con Lucas 14:8 ;con;con;con Santiago 4:13 : cf. Introducción a Proverbios).

Estos (son) también proverbios... los hombres de Ezequías... copiados. El "también" implica la autoría de Salomón de estos, no menos que de los proverbios anteriores. El Espíritu Santo no designó todos los proverbios de Salomón indiscriminadamente para ser incluidos en el canon de todas las épocas, sino una selección adecuada para los fines de la revelación. ¡Qué imprudente es la publicación indiscriminada en biografías de todo lo que han escrito o dicho hombres buenos!

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