Sobre ti fui echado desde el vientre: tú eres mi Dios desde el vientre de mi madre.

Desde el útero La referencia es al padre que recibe al niño al nacer ( Génesis 30:3 ). 'Caí como si fuera en tu regazo, tendido para recibir en mi nacimiento, cuando de otra manera hubiera muerto' (Hengstenberg).

Tú eres mi Dios, es decir, te has mostrado a ti mismo como "mi Dios", por actos de amor, desde mi concepción y nacimiento. Dios era Su Dios "desde el vientre de la madre"; Dios era Su Padre desde la eternidad. El "mi Dios" al final de la primera parte vuelve al mismo punto con el que abrió en ( Salmo 22:1 ) .

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