¿Por qué tomo mi carne entre mis dientes, ansioso por salvar su cuerpo y su vida a cualquier precio, y pongo mi vida en mi mano, buscando salvar su alma o su vida mediante un último y desesperado ejercicio de todas sus fuerzas? No tenía intención de hacer tales esfuerzos porque no se sentía culpable de las acusaciones que se le imputaban. Todavía confiaba en el Señor.

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