Ahora estáis limpios por la Palabra que os he hablado.

Es necesaria una limpieza adicional

Ahora estáis limpios a través de la Palabra y, sin embargo, necesitáis ser purificados.

Tenemos aquí un indicio del misterio de esa doble relación en la que todo creyente está con Dios, de esa doble relación que se declara más completa y dogmáticamente en algunas de las epístolas; pero que todavía se anticipa claramente aquí y en el cap. 10:10. Los fieles en Cristo Jesús son "limpios", siendo por la fe justificados de todas las cosas, y teniendo así terreno firme ante Dios; que, sin embargo, es en cierto modo ideal --su estado actual, aunque siempre se aproxima a éste, pero todavía no se corresponde con él--, necesitan por tanto, por la misma fe, apropiarse cada vez más y más de esa gracia santificante, los purificadores influencias, que continuamente fluyen de Él sobre todos los que son Suyos; y con la ayuda de la cual Él los está convirtiendo en todo aquello que, por Su causa, Su Padre ya ha querido considerarlos, sin embargo, la identidad absoluta de lo que son y lo que se considera que son, está reservada para otro estado de existencia. (Arzobispo Trench. )

La condición presente del cristiano en comparación con el pasado

En Munich se dice que prevalece la costumbre de que todo niño que se encuentre pidiendo limosna en las calles sea arrestado y llevado a un establecimiento benéfico. En el momento en que entra, y antes de que lo limpien y le den la ropa nueva que se le destina, le pintan el retrato con su vestido andrajoso, y precisamente como lo encontraron pidiendo limosna. Cuando termine su educación, se le entrega este retrato, y se le promete bajo juramento que lo guardará toda su vida, para que pueda recordar la condición abyecta de la que ha sido rescatado y la gratitud que le debe al establecimiento que lo resucitó de la miseria y le enseñó cómo evitarla en el futuro.

Dejemos que el cristiano compare a menudo así su condición anterior, de pecador inconverso, con su condición de creyente renovado, para que su amor y gratitud sean excitados y sus afectos atraídos hacia Aquel que ha realizado el cambio.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad