Tú también, que has juzgado a tus hermanas, lleva tu propia vergüenza por tus pecados, que has cometido más abominables que ellas; ellas son más justas que tú; y también tú confunde, y lleva tu vergüenza, en haber justificado tu hermanas.

Ver. 52. Tú también, que has juzgado a tus hermanas. ] Pasó muchas censuras duras e imprudentes sobre ellos, sin mirar en absoluto la parte trasera de la billetera.

Soporta tu propia vergüenza. ] Lo harás bastante seguro; porque donde el pecado está en la silla de montar, hay vergüenza en la grupa. Acepta, pues, el castigo de tu iniquidad; Lev 26:43 da gloria a Dios, deshonra a ti mismo.

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