Hemos dado la mano a los egipcios y a los asirios para que se sacieran de pan.

Ver. 6. Hemos dado la mano a los egipcios ya los asirios. ] Enemigos de los caldeos, no menos de lo que lo fueron para nosotros; pero el hambre fuerte, que echa al lobo del bosque, nos ha alegrado de estar en deuda con ellos por pan; tan mal nos han aliviado y recompensado los crueles caldeos por nuestro trabajo.

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