Ahora, para convencer a Job del pecado y la locura de la impaciencia, Elifaz relata una visión que había tenido, quizás desde que vino a él. Lo cual en esa época y estado de la iglesia, antes de que se escribieran las Sagradas Escrituras, era la forma habitual en que Dios descubría su mente para aquellos que lo buscaban. Una cosa - Heb. una palabra de Dios, un mensaje. Secretamente - Heb. fue robado, o traído a escondidas a mí, en privado y en secreto, como la palabra de Dios solía llegar a los profetas, hablada en sus oídos, como a Samuel, en voz baja y tranquila. No pretende haberlo entendido completamente; pero algo de eso lo percibió. ¡Qué poca porción se oye de Dios! Qué poco sabemos de él en este mundo.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad