No hablar mal de nadie, — El cristiano nunca debe decir nada que se sepa que es falso acerca de un hombre o hablar mal de él con la intención de hacer daño. Este es especialmente el caso de aquellos en posiciones de autoridad, según el contexto de este versículo. no ser pendencieros: los cristianos no deben ser violentos por naturaleza, listos para pelear físicamente en todo momento. No deben ser instigadores de disturbios contra los gobernantes civiles ni causar ruidosas contiendas cuando se ven obligados a rehusar la obediencia. [pero] gentil, — Considere la naturaleza bondadosa de Jesús quien estuvo en todo momento en control de sus emociones.

mostrando toda mansedumbre — La mansedumbre se define mejor como fuerza bajo control. Piensa en términos de un semental domesticado. Los cristianos tienen el poder de la palabra de Dios detrás de ellos cuando son fieles, pero deben ejercer este poder de una manera amorosa mostrando control personal sobre todos los hombres. — Así no sólo deben tratar los cristianos a sus hermanos, sino también a todas las personas.

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