Así es como funciona el Juicio. El juicio de Dios no es despótico ni insensato. Los hombres creen sobre la base de sus motivos y objetivos ocultos. Por lo general, no es la evidencia, sino la honestidad y el amor a la verdad lo que se requiere para creer. Este mundo está configurado de tal manera que todos los que aman el mal son rechazados por Cristo y la Cruz.

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Antiguo Testamento