heb. 4:12. Porque la palabra de Dios (es) viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos, y penetra hasta partir en dos el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y intenciones del corazón.

Biblia en blanco:

12] No se quiere decir que la palabra traspasa hasta separar el alma del espíritu las coyunturas de los tuétanos como algunos han supuesto lo cual es muy ininteligible pero separando esas mismas cosas. La palabra en su poderosa eficacia en la mortificación y conversión, vaciando el alma de sí misma y separándola del pecado y destetándola del mundo y llevándola a una completa abnegación o renuncia a sí misma, hace como si cortara el alma en dos.

Es una cosa sumamente difícil para un hombre renunciar así al pecado y al mundo ya sí mismo. Es como dar su vida. El alma en este trabajo es como si estuviera cortada en dos. Las articulaciones en las partes del cuerpo que están naturalmente unidas (?), sí, el mismo hueso, es como si estuviera dividido por la mitad de la médula.

heb. 4:13-14

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