Tenemos las peticiones ; nuestras oraciones son aceptadas y serán respondidas de esa manera y en el tiempo que sea para la gloria de Dios y nuestro mayor bien. Ver nota al capítulo 1 Juan 3:22 . Las oraciones ofrecidas según la voluntad de Dios siempre son aceptadas por él; y en la concesión de aquellas bendiciones que son más para su gloria, para el bien del oferente y del universo, son respondidas en el más alto y mejor sentido.

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