Ahora, cuando, etc.— Los sacerdotes comunes iban todos los días al tabernáculo exterior para encender las lámparas, quemar el incienso o poner, en los tiempos señalados, el pan de la proposición sobre la mesa; como actos, se llama realizar el servicio de Dios. Las lámparas debían encenderse todas las noches, y el sacerdote debía quemar incienso cada mañana y cada noche: ver Éxodo 30:7

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad