Verso Lucas 5:5. Simon - dijo - Maestro... επιστατα. Este es el primer lugar en el que aparece esta palabra; no es utilizada por ninguno de los autores inspirados, excepto Lucas, y él la aplica únicamente a nuestro bendito Señor. Significa propiamente un prefecto, o alguien que está a cargo de ciertos asuntos o personas; también se usa para un instructor o maestro. Pedro consideraba a Cristo, por lo que había oído, como maestro de una doctrina divina, y con autoridad para mandar. Parece comprender ambas ideas en este apelativo: escuchaba atentamente su enseñanza, y obedecía de buen grado sus órdenes. Escuchar atentamente y obedecer alegremente son deberes que debemos, no sólo al soberano Maestro del mundo, sino también a nosotros mismos. Ningún hombre tomó jamás a Jesús provechosamente por su maestro, que no lo recibiera al mismo tiempo como su Señor.

Hemos trabajado toda la noche... Habían echado la red varias veces en el transcurso de la noche, y la habían sacado a la orilla sin éxito, y ahora estaban muy desanimados. He visto varios esfuerzos de este tipo que no han dado fruto. Todo trabajo debe ser infructuoso donde no está la bendición de Dios; pero especialmente el del ministerio. Es la presencia y la influencia de Cristo en una congregación lo que hace que las almas se reúnan para sí: sin esto, cualquiera que sea la elocuencia o las habilidades del predicador, todo será una noche y un trabajo infructuoso.

En tu palabra tiraré la red... El que asume el carácter de pescador de hombres, bajo cualquier autoridad que no proceda de Cristo, seguramente no pescará nada; pero el que trabaja por orden y bajo la dirección del gran Pastor y Obispo de las almas, no puede trabajar en vano.

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