Sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo (12), sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir; todos son tuyos;

(12) Pasa de las personas a las cosas mismas, para que su argumento sea más contundente. En efecto, asciende de Cristo al Padre, para mostrar que no descansamos en Cristo mismo, en que es hombre, sino porque él nos lleva hasta el Padre, como Cristo testifica de sí mismo en todas partes que fue enviado por su Padre, que por esta banda estemos todos unidos con Dios mismo.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad