(8) Y vino a Éfeso un judío llamado Apolos, nacido en Alejandría, hombre elocuente y poderoso en las Escrituras.

(8) Apolos, hombre piadoso y culto, no se niega a aprovechar la escuela de un artesano vil y abyecto, y también de una mujer: y así se convierte en un excelente ministro de la Iglesia.

(n) Muy bien instruido en el conocimiento de las Escrituras.

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