Cuando (1) Jesús hubo dicho estas palabras, salió con sus discípulos por el arroyo Cedrón, donde había un huerto, en el cual él entró, y sus discípulos.

(1) Cristo va por su propia voluntad a un jardín, que su traidor conocía, para ser tomado, a fin de que por su obediencia pueda quitar el pecado que entró en el mundo por la rebelión de un hombre, y eso en un jardín.

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