Qué ejemplo sorprendente ofrece Jonás aquí, cómo las mentes de los hombres se endurecen por el engaño del pecado. Él, para quien se levantó esta tormenta, era el único insensible al peligro. Los pecadores dormidos en una tormenta de juicios nacionales, son los Jonás de la actualidad.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad