• Salmo 10:2

    Con arrogancia el impío persigue al pobre. ¡Sean atrapados en los artificios que han maquinado!

  • Salmo 10:3

    Porque el impío se gloría del apetito de su alma, y el codicioso maldice y desprecia al SEÑOR.

  • Salmo 10:4

    El impío, por la altivez de su rostro, no le busca; no está Dios en ninguno de sus pensamientos.

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