• Salmo 31:3

    Porque tú eres mi roca y mi fortaleza, por amor de tu nombre me guiarás y me encaminarás.

  • Salmo 31:4

    Sácame de la red que han escondido para mí porque tú eres mi fortaleza.

  • Salmo 31:5

    En tus manos encomiendo mi espíritu; tú me has redimido, oh SEÑOR, Dios de verdad.

  • Salmo 31:6

    Aborrezco a los que esperan en los ídolos vanos, pero yo en el SEÑOR he confiado.

Continúa después de la publicidad