• Salmo 58:1

    Al músico principal. Sobre “No destruyas”. Mictam de David. Oh magistrados, ¿en verdad pronuncian justicia? ¿ Juzgan rectamente a los hijos del hombre?

  • Salmo 58:2

    Más bien, con el corazón obran iniquidad en la tierra y a la violencia abren camino con sus manos.

  • Salmo 58:3

    Los impíos se alienaron desde la matriz; se descarriaron desde el vientre hablando mentira.

  • Salmo 58:4

    Tienen veneno como veneno de serpiente; son como una cobra sorda que tapa sus oídos

  • Salmo 58:5

    y no oye la voz de los encantadores, aun del más experto encantador.

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