• Santiago 5:16

    Por tanto, confiésense unos a otros sus pecados, y oren unos por otros de manera que sean sanados. La ferviente oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho.

  • Santiago 5:17

    Elías era un hombre sujeto a pasiones igual que nosotros, pero oró con insistencia para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra durante tres años y seis meses.

  • Santiago 5:18

    Y oró de nuevo, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto.

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