Así que, ni el que planta es cosa alguna, ni el que riega; sino Dios que da el crecimiento.

Tampoco es él que... cualquier cosa... sino Dios , es decir, es todo en todos. "Dios" es enfáticamente el último en el griego, "El que da el crecimiento (es decir), DIOS". Aquí sigue un paréntesis, depara, donde, "Que nadie se gloríe en los HOMBRES" está en contraste antitético con DIOS aquí.

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