Y en el tiempo postrero de su reino, cuando los transgresores hayan llegado al colmo, se levantará un rey altivo de rostro y entendido en oscuras sentencias.

En el último tiempo de su reino, cuando los transgresores lleguen al colmo. Esto no se aplica a los tiempos de Antíoco, sino a los tiempos finales de la era cristiana. Compararen cuanto a la maldad del mundo en general, justo antes de la segunda venida de Cristo; también ( 2 Timoteo 3:1).

La culpa de Israel, también, será entonces plena, cuando los que rechazaron a Cristo recibirán al Anticristo; cumpliendo las palabras de Jesús, "Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, a éste recibiréis" (cf., "La iniquidad de los amorreos aún no está completa", "Llenad, pues, la medida de vuestros padres" "prohibiéndonos hablar a los gentiles para que se salven, para llenar sus pecados para siempre").

Un rey de fiero semblante... se levantará, uno que no perdonará ni a los viejos ni a los jóvenes.

Y entender oraciones oscuras, más bien, artificios (Gesenius). Antíoco se hizo señor de Egipto y de Jerusalén sucesivamente por astucia (1Ma 1:30, 'El rey envió a su principal recaudador de tributos, el cual vino a Jerusalén con una gran multitud, y les hablaba palabras pacíficas; pero todo era engaño: porque cuando le habían dado crédito, cayó de repente sobre la ciudad, y la hirió muy gravemente, y destruyó mucho pueblo de Israel,' etc..; 2Ma 5:24 ,

'Antíoco envió también a ese abominable cabecilla, Apolonio, con un ejército de veintidós mil, mandándole que matara a todos los que estaban en su mejor edad, y que vendiera a las mujeres y a los más jóvenes; el cual, viniendo a Jerusalén, y fingiendo la paz, se detuvo hasta el día santo del sábado, cuando, tomando a los judíos que celebraban el día de fiesta, mandó a sus hombres que se armaran, y así mató a todos los que habían ido a la celebración del sábado', etc.)

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