Tus manos me hicieron y me formaron; dame entendimiento para que aprenda tus mandamientos.

Tus manos me hicieron y me formaron. Esto dice Israel, conforme a lo que le dijo Moisés: (cf ).

Dame entendimiento para que aprenda tus mandamientos. 'Todo lo que soy o puedo es tuyo; Yo, por lo tanto, no puedo enseñarme a mí mismo; enséñame tú' (Cocceius). El don de entendimiento en la voluntad y la Palabra de Dios es el don supremo sin el cual el nacimiento natural de uno sería una maldición, en lugar de una bendición.

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