Apocalipsis 8:3

Se paró ante el altar, con un incensario de oro. En las visiones hay una alusión al tabernáculo y sus partes. El altar de los perfumes estaba en el santuario, cerca de la entrada al sanctum sanctorum [el lugar santísimo], y aquí se dice que el altar de oro está delante del trono de Dios. Se dice que el incienso del incensario son las oraciones de todos los santos, que ofreció el ángel. El altar parece significar nuestro Salvador Cristo, ya que las oraciones de todos los fieles siempre se hacen a través de los méritos de Cristo, nuestro único Mediador o Redentor principal.

Por el fuego arrojado sobre la tierra (ver. 5) se representa el fuego de la caridad divina, que ahora debe ser ejercida por los caminos de la justicia, para atraer a las personas a su conversión mediante el castigo. (Witham) --- Podemos observar tanto en este como en otros lugares del Apocalipsis, que San Juan hace continuas alusiones a lo que se hizo en el templo de Jerusalén, por lo que nos da razones simbólicas. Así, en la presente ocasión, el incienso que se ofrecía por la mañana y por la tarde en el templo, sobre el altar de oro, se representa como hecho aquí en el cielo. (Calmet)