Sirva a Dios en su llamamiento

1 Corintios 7:15

Hubo mucha inquietud con respecto al matrimonio en la iglesia de Corinto. Un ascetismo antinatural se estaba manifestando en algunos sectores y una autocomplacencia sin ley en otros. Pablo se opuso resueltamente a estas tendencias. Si bien sostuvo que el matrimonio debe contraerse solo en el Señor, también enseñó que donde se había consumado no debe disolverse a instancia del cristiano, aunque se puede acceder al deseo del cónyuge incrédulo. Los niños, también, nacidos cuando uno de sus padres era pagano, podrían considerarse limpios.

El Apóstol se refiere tanto a la vocación como a la vida cristiana como un llamado divino, 1 Corintios 7:18 . Todos estamos llamados a nuestro oficio o profesión tanto como un estudiante al ministerio. Es interesante que un hombre hable de su negocio como su vocación. Dios tiene un propósito para cada uno de nosotros y nos llama a cumplirlo.

A menos que seamos especialmente guiados a hacer lo contrario, al entrar en la vida cristiana, debemos permanecer en el mismo llamamiento en el que pasamos nuestra vida anterior. La única diferencia es que debemos permanecer en él con Dios, 1 Corintios 7:24 . En todo servicio, por humilde que sea, debemos tener la mirada puesta en Cristo. Todo puede hacerse en Él, con Él, para Él.

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