"Y esto continuó por espacio de dos años, de modo que todos los que habitaban en Asia oyeron la palabra del Señor, tanto judíos como griegos".

La medida fue exitosa y, lejos de obstaculizar a la iglesia, resultó en dos años en la difusión de 'la palabra del Señor' por toda Asia Menor, tanto entre judíos como entre gentiles. 'Todos esos' es una exageración que indica la naturaleza generalizada de la difusión de la palabra. De este evangelismo surgirían las 'siete iglesias de Asia' a las que Juan escribe en Apocalipsis. También se establecerían iglesias en Laodicea, Colosas y Hierápolis, aunque no por el mismo Pablo ( Colosenses 2:1 ). De hecho, era una gran puerta la que se había abierto.

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