Y algunos comenzaron a escupirle, a cubrirle el rostro, a abofetearle y a decirle: Profetiza; y los criados le golpearon con las palmas de las manos.

Ver. 65. Profecía ] Est hic sarcasmus amarulentissimus. (Piscator.) Ésta es una burla de lo más amarga.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad