Porque la mujer que tiene marido está obligada por la ley a su marido mientras él viva; pero si el marido muere, ella queda libre de la ley de su marido.

Ver. 2. Está suelta, etc. ] Y así, en libertad de casarse de nuevo, aunque Jerónimo los compara con las bestias inmundas en el arca, y con los vasos de deshonra en una casa, sí, con los perros que vuelven a su vómito; que fue su error. Patres legendi cum venia, dice uno.

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