Los tiempos del Mesías se denominan con frecuencia los últimos días, siendo el Evangelio la última dispensación de la gracia divina. Derramaré de mi Espíritu - No solo en el día de Pentecostés, sobre toda carne - Sobre personas de toda edad, sexo y rango. Y sus jóvenes verán visiones: en los jóvenes, el sentido exterior es más vigoroso y la fuerza corporal es completa, por lo que están mejor capacitados para soportar el impacto que generalmente acompaña a las visiones de Dios. En los ancianos, los sentidos internos son más vigorosos, adecuados para los sueños divinos. No es que los viejos estén totalmente excluidos de lo primero, ni los jóvenes de lo segundo.

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