Hebreos 13:13-25

13 Este es el clímax de la epístola. La elección es entre la fe y la apostasía. La referencia es al ritual del becerro de oro (Ex.33). Habría sido apostasía salir del campamento si no hubiera habido apostasía en el campamento. Israel había dejado nuevamente de ser "la congregación del Señor", y debían ponerse del lado del Mesías que sufrió fuera de la puerta o apostatar. Un apóstata reconoce la verdad y se niega a obedecerla.

20 El Dios de paz, ¡qué ancla para las almas turbulentas de los hebreos en el tumulto de los tiempos en que vivían! Josefo podría escribir un libro entero sobre el tema de la Guerra Judía que mantuvo a Palestina en continua agitación hasta la destrucción de Jerusalén bajo Tito. ¡Qué apropiado cerrar la epístola con este título! En el reino venidero Cristo será Rey de Salem (paz, bienestar) así como Rey de justicia.

En perfecta armonía con esto está la imagen pastoral del gran Pastor. Como buen Pastor, dio Su alma por las ovejas. Ahora, como el gran Pastor, en resurrección, todavía cuida y protege a los Suyos. Hermosa como esta imagen es; encuentra su lugar en la tierra, y sólo puede aplicarse a Israel, la nación de Su elección. La iglesia no es un redil. Israel no es "un rebaño", como en AV, sino "un rebaño" (Juan_10:16). Dentro del redil las ovejas no necesitan el cuidado del Pastor, pero cuando son conducidas a pastar, él las guía y las defiende. Estos hebreos estaban lejos del redil.