No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal . Del mal (1.) primero de la culpa, que es el único mal real. (2.) De castigo, es decir , para preservarlos de toda adversidad, o fortalecerlos para soportarla. (3.) Del maligno, sus lazos y tentaciones. En griego του̃ πονηζου̃ .

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Antiguo Testamento