Pero Festus respondió ... - Se desconoce qué indujo a Festus a rechazar su solicitud. Sin embargo, es probable que se le haya informado que Pablo era ciudadano romano y que su caso no podía presentarse ante el Sanedrín judío, sino que debía ser escuchado por él mismo. Como Cesarea también era en ese momento la residencia del gobernador romano, y el lugar de celebración de los tribunales, y como Pablo estaba alojado allí a salvo, no parecía haber ninguna razón suficiente para llevarlo a Jerusalén para ser juzgado. Festus, sin embargo, les concedió todo lo que razonablemente podían pedir, y les aseguró que debería tener un juicio rápido.

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