Cuando llegaron, subieron a un aposento alto donde solían celebrar sus reuniones. Los aposentos superiores, tan frecuentemente mencionados en las Escrituras, eran aposentos en la parte más alta de las casas, apartados por los judíos para la oración privada. Estos, debido a que eran tan retirados y convenientes, los apóstoles ahora los usaban para todos los oficios de la religión. Aquí estaban reunidos los once, que continuaban unánimes en oración y súplica Y eso con gran intensidad y ardor de alma; con las mujeres de las que se mencionó anteriormente que asistían a la cruz de su Señor, y que estaban temprano en el sepulcro el día en que él se levantó; y María, la madre de Jesús, mencionada aquí la última vez en las Escrituras;y con sus hermanos, sus parientes cercanos, quienes por algún tiempo no creyeron; probablemente no hasta cerca, o incluso después, del momento de su muerte.

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