Verso Hechos 12:23. El ángel del Señor lo golpeó... Su muerte fue evidentemente un juicio de Dios.

Porque no le dio a Dios la gloria... No reprendió a sus aduladores, sino que permitió que le dieran ese honor que le correspondía solo a Dios. Hechos 12:21.

Y fue devorado por los gusanos... No podemos decir si esto fue el morbus pedicularis, o si una violenta inflamación de sus intestinos, que terminó en putrefacción, no produjo realmente gusanos, que, durante varios días, pulularon en sus entrañas infectadas. Lo más probable es que fuera esto último; y esto es a la vez más acorde con la letra del texto, y con las circunstancias del caso tal como lo relata Josefo.

Y entregó el espíritu... Es decir, murió de la enfermedad que padecía entonces, después de haber permanecido cinco días en tormentos insoportables, como ha declarado Josefo. Antíoco Epífanes y Herodes el Grande murieron del mismo tipo de enfermedad.  Vea las observaciones al final de Hechos 1:26 relativas a la muerte de Judas.

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