(13) Esta [es] una (i) palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores; de quien soy el jefe.

(13) Vuelve el oprobio de los adversarios sobre su propia cabeza, mostrando que este ejemplo singular de la bondad de Dios contribuye en gran medida al beneficio de toda la Iglesia.

(i) Digno de ser creído.

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