(5) Es como un grano de mostaza que un hombre toma y echa en su jardín; y creció y encerró un gran árbol; y las aves del cielo se posaron en sus ramas.

(5) Dios comienza su reino con pequeños comienzos para que su crecimiento, que no se espera, exponga mejor su poder.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad