CONTENIDO

Este bendito Salmo se aplica tan directamente, bajo la influencia de Dios el Espíritu Santo, por los apóstoles Pedro y Pablo, a la persona y obra del Señor Jesús, que debemos pasar por alto por completo a David, el escritor de él, (excepto considerarlo como profeta), para no perder el gran objetivo que pretendía, al suponer que lo que este Salmo contiene es el deber de David. Aquí Cristo, y su fe en los compromisos del pacto, se exponen maravillosamente.

Mictam de David.

Salmo 16:1

Esta es la primera vez que nos encontramos con la palabra Mictam a modo de título desde que abrimos el libro de los Salmos. Varias han sido las traducciones de esta palabra; pero todos están de acuerdo en que tiene la intención de implicar algo muy importante. Algunos lo han convertido en precioso; otros, dorado; y otros, joya preciosa. Y como el Espíritu Santo, por los apóstoles Pedro y Pablo, ha demostrado que todo se trata del Señor Jesucristo, lo que aquí se dice de él es precioso, es dorado, es una verdadera joya.

¡Señor! Diría para mí y para Lector, al entrar en su lectura, "Hazlo por el dulce olor de su nombre, precioso en verdad como ungüento derramado". La primera apertura, en esas palabras de Jesús, que David marcó aquí por el espíritu de profecía, demuestra claramente a quién pertenece, por el pasaje paralelo en la vida de Jesús. Ver Juan 12:27 .

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad