• Romanos 3:4

    ¡De ninguna manera! Antes bien, sea Dios veraz aunque todo hombre sea mentiroso, como está escrito: Para que seas justificado en tus palabras y venzas cuando seas juzgado.

  • Romanos 3:5

    Pero si nuestra injusticia hace resaltar la justicia de Dios, ¿qué diremos? ¿Acaso es injusto Dios que da el castigo? (Hablo como hombre).

  • Romanos 3:6

    ¡De ninguna manera! Porque en tal caso, ¿cómo juzgaría Dios al mundo?

  • Romanos 3:7

    Pero si la verdad de Dios abundó en mi falsedad para su gloria, ¿por qué todavía soy juzgado yo como pecador?

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