• Salmo 101:3

    No pondré delante de mis ojos cosa indigna; aborrezco la obra de los que se desvían. Ella no se me pegará.

  • Salmo 101:4

    El corazón perverso será apartado de mí; no reconoceré al malo.

  • Salmo 101:5

    Al que solapadamente difama a su prójimo, a ese yo lo silenciaré; no soportaré al de ojos altaneros y de corazón arrogante.

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